Erich García, una llave de las criptomonedas en Cuba
“Lo vengo diciendo y no es matraca mía. Vas a poder hacer una cantidad de cosas con las criptomonedas… Vas a poder recargarte el teléfono, comprar en Amazon, en Adidas, en eBay… De todo con criptomonedas… de todo”.
De esta manera habla el youtuber y emprendedor cubano Erich García a quienes visitan Bachecubano, su canal de YouTube, donde aborda lo más reciente en tecnología y brinda consejos sobre cómo sacarle provecho desde Cuba, una isla a la que todos los avances técnicos llegan siempre un poco tarde.
De hecho, hace solo unos días pudimos verlo pagar la cuenta en Yarini Habana con Bitcoin. En un video en su cuenta de Twitter explicaba cómo pagar a través de la red Lightning Network escaneando un código QR ¡y todo en menos de un minuto!
Cuando en 2015 se hizo en el país la primera transacción con monedas digitales, este joven habanero era uno de los tantos incrédulos a los que el tema les sonaba como un canto de sirenas. Sin embargo, hoy es uno de los mayores impulsores del uso de las criptodivisas en Cuba.
Sobre el impacto de estos activos digitales en los cubanos y la posibilidad que les brinda de posicionarse en el mundo sin sufrir restricciones, conversa Erich con VISTAR.
Tengo entendido que, al inicio, las criptodivisas te resultaban sospechosas. Hoy le explicas a tus más de 70 000 suscriptores en YouTube cómo usarlas, ¿qué te hizo cambiar de opinión?
Cuando empecé a escuchar sobre el fenómeno de las criptomonedas se asociaba con una manera mágica de ganar dinero y el enfoque que uno va descubriendo con el paso del tiempo no es de ganar o perder, sino de usar el dinero de una forma más inteligente.
Estábamos entonces en 2016 y no había suficiente información, por tanto, inicialmente me generaba mucha sospecha. Realmente me cambia la percepción a mediados del año pasado a partir de mis propias necesidades, de pagar servicios de internet, consumir productos, enviar dinero.
Descubrí que a través de Bitcoin podía hacerlo. Comencé a documentarme mejor, con más madurez y me di cuenta de cómo era posible aceptar pagos por productos o servicios personales mediante Bitcoin y esa fue la magia.
Percatarme de que gracias a un activo digital no centralizado, que no cree en términos de sanciones, bloqueos, color de la piel, religión o diferencia política, puedes encontrar un mercado. Dije ¡wow!, esta es la manera en que podemos los cubanos posicionarnos en el mundo sin sufrir las restricciones.
Adquirir las criptodivisas, una acción que para cualquier persona en el exterior pudiera ser medianamente sencilla auxiliándose de una tarjeta Visa o MasterCard, para los residentes en la Isla también resulta imposible. ¿Cómo pueden las personas en Cuba adquirir este tipo de monedas?
El cubano no tiene la forma viable de comprar criptomonedas porque no dispone de los instrumentos financieros necesarios para ello, y convertirlas en tasas de cambio formales es imposible. Por eso deben adquirirlas a través de alguna persona (peer) que se lo venda, ya sea por los grupos en Telegram, WhatsApp, o mediante una forma directa, pues hay quienes se están convirtiendo en promovedores de criptodivisas.
Existe también para eso un sitio que es CubaXchange, cuya función, precisamente, es gestionar las redes persona a persona (peer to peer) para que uno le venda la cripto al otro y no existan estafas.
Actualmente en Cuba converge una diversidad de criptodivisas muy interesante, ¿hay alguna que tenga la voz cantante?
Realmente las personas están usando USDT, TRX, Ethereum, Litecoin, etc., pero la que manda, la que decide el curso de la historia, es Bitcoin, sí o sí.
¿Qué utilidad tienen las criptomonedas en Cuba? ¿Qué usos podemos darle los cubanos?
Primeramente se están utilizando criptoactivos como reserva de valor, o sea, las compran con pesos cubanos (CUP), y las guardan porque tienen la esperanza de que el valor de esa moneda se incremente con el tiempo.
También están encontrando en ellas una manera de resolver sus necesidades emergentes, y es lo más potencial, pues a través de las monedas virtuales pueden comprar en sitios internacionales que las acepten y que los provean como cubanos de un servicio o de un producto.
El solo hecho de poder entrar al mercado y convertirse en clientes de esos sitios que admiten esa forma de pago y que respetan el anonimato, está genial. Igualmente, hay quienes generan ingresos a través de las estrategias de trading (comercio). Y por otro lado, están aquellos que se inclinan hacia los esquemas piramidales.
En una crisis económica como la que vive el país, agudizada por la covid-19, ¿qué oportunidades traen las criptomonedas para los cubanos?
Creo que esa es la solución ahora. Las personas pueden enviar o recibir pagos globales, sin restricciones. Pueden comprar tarjetas de regalos, comida, servicios, productos, celulares, computadoras, quién sabe si hasta servicios logísticos.
Cualquier necesidad básica que tengas hoy la puedes resolver con criptoactivos. La gente está abriendo la mente y el diapasón, está creciendo. Incluso, con esto muchas personas que trabajan a través de internet, han hallado un canal de pago.
A ti se deben dos de las plataformas con mayor impacto cuando se habla de monedas virtuales en la Isla: BitRemesas y QvaPay. Con la plataforma BitRemesas muchas personas han hallado una alternativa para enviar remesas a Cuba mediante Bitcoin. ¿Por qué se dice que con BitRemesas todos ganan?
Con BitRemesas automaticé el sistema de envío y entrega de remesas a través de redes (peer to peer).
O sea, una persona quiere mandar una remesa a un familiar en Cuba y lo que hace es pagar en BitRemesas la cantidad que desea enviar. La plataforma coordina automáticamente entre todas esas personas que están dispuestas a aceptar criptomonedas y pagar en MLC o USD al destinatario en Cuba.
De esa manera estos peers compiten entre ellos para adquirir la cripto por el mayor precio posible. Salen ganando porque la adquieren a un costo más barato que en el mercado informal y gana también ese familiar en Cuba, que recibió en menos de 24 horas su remesa, a una tasa de cambio superior a las originales. Es un mercado más saludable, menos propenso a estafas donde todos se benefician.
QvaPay es una pasarela de pagos internacionales con criptodivisas. ¿Cuán útil puede ser para los emprendedores cubanos?
Con QvaPay lo que hice fue solucionar el tema del pago para que los negocios interesados se sumen y se quiten ese dolor de cabeza. Si tú tienes un negocio que venda hamburguesas y quieres aceptar criptomonedas, debes contratar a un programador que te dedique de 20 a 40 horas de trabajo aproximadamente y esto además de ser muy costoso, casi nunca queda perfecto. Entonces en QvaPay tienes la solución de que con tres clics ya automatizas todo tu proceso de ventas.
Lo otro es que las comisiones por ventas no aplican aquí. En este sentido me siento un poco Robin Hood. Puedo decirles, señores, usen esta variante que creé sin impuestos. Es una forma de expandir su negocio, darse a conocer y abrirse al mundo.
Ante el aumento de casos positivos a la covid-19 y la emergencia sanitaria en las provincias, esta plataforma ha tendido un puente hacia el exterior para todas aquellas personas que deseen realizar donaciones y auxiliar a Cuba…
Realmente no se me ocurrió a mí la idea.
Un twittero sugirió crear una página en QvaPay para que la gente donara, e inmediatamente me di cuenta que era posible hacer una página para una causa que aceptara pagos con un fin humanitario.
La creé y ajusté algunos detalles para que se viera con transparencia el saldo recopilado, y las transacciones. Habría que investigar mejor pero creo que es la primera vez en el país que se hace una acción benéfica a través de las criptomonedas. Ha sido para nosotros un suceso muy bonito.
¿Crees que para los cubanos representa una oportunidad comenzar a modelar todos los negocios de pago hacia los criptoactivos?
Ahora mismo las soluciones de pago que tiene el cubano que le permite expandirse son: pago al cash, EnZona o Transfermóvil. Cualquiera de estas implica que el negocio no escala, hay que hacerlo in situ o a través del método convencional.
Las criptomonedas, por su parte, globalizan, y permiten automatizar procesos en el negocio. Por ejemplo, ¿por qué una persona en Australia no puede pagar para que una dulcería en La Habana le entregue un cake a su mamá por el día de las madres?
Son gestiones muy normales en el mundo que al cubano le resulta sumamente difícil y que solo es posible hacerlo ahora a través de criptoactivos.
Este 15 de septiembre entró en vigor en el país una resolución del Banco Central de Cuba que regula el uso de determinados activos virtuales en transacciones comerciales, así como el otorgamiento de licencias a proveedores. ¿En qué medida esta nueva regulación podría cambiar la dinámica del uso de criptomonedas que ya existe en la Isla?
Desde mi perspectiva, con esta regulación, el Banco Central de Cuba reconoce a las criptomonedas como un activo de valor, cosa que antes no hacía. Esto significa que, probablemente, le otorguen licencias a instituciones financieras de Cuba, empresas, organismos, para que acepten o paguen en ese tipo de valor.
Con respecto a la posibilidad de usar las criptomonedas por parte de las personas de a pie, o sea, del cubano normal, no hay ningún tipo de cambio. Pueden seguir utilizando estos activos digitales para lo que deseen, siempre y cuando la actividad que estén desarrollando sea legal.
Realmente, hay que esperar las disposiciones de las nuevas leyes a ver qué se puede hacer y qué no. No obstante, muchos cubanos han visto esto como una esperanza, como un atisbo de oportunidades favorables.
¿Cuán fiable puede ser una moneda a la que ningún sistema ni gobierno es capaz de controlar?
Esto ya es un criterio más global. Hay muchas opiniones al respecto. En cuanto a la seguridad y al respaldo, creo que el respaldo se lo da la gente. Mientras más personas consuman, más respaldo tendrá.
Hay una analogía muy simpática y es que si tú naufragas en una isla con una billetera de Bitcoins no haces absolutamente nada, y si naufragas con un kilogramo de oro, tampoco haces nada. Entonces todo depende de la percepción que se le dé al activo.
El oro se utiliza en la industria electrónica, pero el 90 por ciento se utiliza como reserva de valor. También en Bitcoin las personas ven un activo digital tan útil y valorado subjetivamente como el oro. Es una cuestión de percepción individual.
Precisamente por la libertad financiera que tienen, el valor de estos activos es muy volátil, ¿qué asegura que no caigan en picada de un momento a otro?
Nada lo asegura, al contrario. Existen las monedas estables que son respaldadas en dólares. Pero al final, si tú tienes una moneda respaldada en dólares, por ejemplo, USDT anclada al valor de una moneda fiat, y esa moneda fiat anualmente se devalúa alrededor de un 2%, estás formando parte del juego bancario mundial.
Ahora mismo todas las criptomonedas se están desinflando porque hubo una inflación hace algunos meses desorbitante. Pero si lo miras globalmente, desde el año pasado hasta hoy han estado en crecimiento. Todo depende de la métrica con la que midas el éxito.
El gobierno cubano se ha pronunciado sobre la necesidad de avanzar en el estudio de las criptomonedas. La nueva resolución que entró en vigor indica que el tema va en serio. ¿Cuán beneficioso podría ser esto para la economía cubana en términos de apertura internacional?
Te voy a poner solo un ejemplo. El mercado de Bitcoin solito, sin mencionar otras criptomonedas, está capitalizado en 600 mil millones de dólares. Ahí se están perdiendo oportunidades. Es como vender pirulís y aceptar solamente CUP y que todos los clientes que te rodeen tengan libras esterlinas, obviamente te estás perdiendo un mercado.
Por ejemplo, El Salvador, está definiendo como moneda legal el Bitcoin, y aunque han recibido muchas críticas por eso, yo solo veo ahí un movimiento magistral por parte del presidente. Lo que están haciendo es abrir el mercado.
Y en el tema de Cuba, podría suceder lo mismo. Si se venden paquetes turísticos, servicios médicos, níquel, o lo que sea que vaya a vender el país en Bitcoin, se expande el mercado, se amplía el horizonte y se crece. De concretarse, no habrá sanción que los detenga.