Michel Mirabal: una obra que llega hasta Egipto
El pasado 15 de octubre, en la sede de la residencia de embajador de Egipto en Cuba, la obra de Michel Mirabal fue la protagonista indiscutible.
Un día de celebración
Con la invitación especial por parte del Exmo. Señor Maher El-Adawy, embajador de Egipto en Cuba, y su esposa, otras personalidades de relevancia acudieron al homenaje brindado al artista Michel Mirabal.
El pintor cubano fue aplaudido en esta ocasión por el director de cine Alejandro Pérez, los embajadores o agregados diplomáticos en Cuba de Arabia Saudí, Marruecos, Haití, Nigeria, Kuwait, Estados Unidos y República Dominicana, así como periodistas y críticos de arte.
“Por primera vez en la historia, (…) la bandera cubana, al estilo de Mirabal, se funde en perfecto equilibrio y armonía sobre el antiguo soporte para la escritura y la pintura inventado por los egipcios: el papiro”
(palabras del Exmo. Señor Maher El-Adawy, embajador de Egipto en Cuba).
Egipto, un país con 72 años de relaciones diplomáticas con Cuba, es considerado la cuna del arte, la madre de las civilizaciones, la “mars om eldonia”, en su propia lengua. No es casualidad que sea precisamente este país el que elogia de esta manera la obra de Michel Mirabal.
El comienzo de una historia: Michel Mirabal, su obra, su vida
Michel Mirabal Martínez tiene el arte en sus propios genes. Su abuela paterna es la cantante y actriz Martha Jean Claude, y su tía, la cantante de ópera Linda Mirabal.
Graduado del Instituto Superior de Diseño (ISDI), asistió de manera simultánea a la Escuela Nacional de Artes Visuales San Alejandro. Con una amplia carrera profesional de 25 años, comenzó en el Ballet Nacional de Cuba como pintor escenográfico, y luego se incorporó al Instituto Cubano del Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC) como dibujante rápido.
Creador de 11 series representativas de elementos icónicos de la naturaleza humana y el entorno patrio, a los cuales incorpora los matices de sus experiencias e ideales, para crear como resultado de ello una especie de simbiosis entre la cultura cubana y las percepciones propias de un nacional.
“La pasión y energía que imprime a su obra es la fiel expresión del respeto y la admiración que siente y compartimos por la cultura e historia egipcia”
(palabras del Exmo. Señor Maher El-Adawy, embajador de Egipto en Cuba).
Los excelentes resultados alcanzados a lo largo de su ejercicio profesional en el mundo del arte, lo han llevado a convertirse en un indiscutible representante del arte contemporáneo cubano dentro del sector de las creaciones visuales, en los que ha tenido la posibilidad de realizar más de 40 exposiciones personales y participar en más de 50 exposiciones colectivas, ambas modalidades llevadas a cabo tanto en Cuba como en diversos países de América del Norte, Latinoamérica y Europa.
Su obra en Cuba y el mundo
El nombre de Michel Mirabal, a través de su obra, aparece, entre otros, en Barrio Latino (Francia), Saint Petersburg (Florida, USA), Exterior Medina Marrakech (Marruecos), Consejo de Estado (República de Cuba), Fundación Cultural Martha Jean Claude (Haití), Museo de Bellas Artes de Medellín y Bogotá (Colombia), Organización Internacional de la Aviación Civil (Montreal, Canadá), las embajadas de Cuba en Canadá, Marruecos e Italia, y las sedes diplomáticas en Cuba de países como Marruecos, Emiratos Árabes y Haití.
Asimismo, su obra está presente en muestras privadas, como las pertenecientes a Felipe VI (Rey de España), Mohamed VI (Rey de Marruecos), Donald Trum, Barack Obama, René Preval (expresidente de Haití), Danny Glover, Muhammad Alí, Usher, Gabriel García Márquez, Angela Mizzoni, Quincy Jones, Carlos Santana, Jay Z, Dave Grutman, Mike Fernández, Carlos Gutiérrez, Andrés Fanjul, Paul L. Cejas y Antoun Sehnaoui.
De Pintor de la Patria a Pintor de Faraones
El homenaje que Michel Mirabal recibiera el pasado día 15, tiene sus orígenes en un regalo que el pintor le hiciera al embajador y el presidente de Egipto.
El artista cubano decidió fusionar ambas culturas y pintó algo específicamente para la embajada de Egipto. De sus manos salió entonces algo único, especial: una bandera cubana dibujada sobre un papiro, fundida en él. El embajador y el presidente de Egipto, Abdelfatah El-Sisi, recibieron sendos cuadros idénticos del artista cubano.
Después de este gesto, Michel, amigo de la nación de las pirámides, tuvo una inesperada muestra de agradecimiento: el propio presidente Abdelfatah El-Sisi se comunicó en persona con el embajador para agradecer el gesto del artista e invitarlo lo más pronto posible a que exponga su obra en El Cairo.
“Puedo afirmar que el Pintor de la Patria se ha convertido en otro hijo para la ‘madre de las civilizaciones’, otro pintor de faraones”
(palabras del Exmo. Señor Maher El-Adawy, embajador de Egipto en Cuba).
Este reconocimiento se suma a los que ha obtenido por su exitosa trayectoria profesional, materializados en la entrega de diversos lauros, condecoraciones y becas-premio asignados por la encomiable labor dentro de las artes visuales.
Con todos sus merecidos méritos, Michel Mirabal en la actualidad continúa vinculado a diversos proyectos de diferente naturaleza, siendo el más importante de ellos el que se implementa en el marco del Proyecto Comunitario Finca Calunga Estudios Michel Mirabal. Con este trata de vincular el arte con la comunidad en la que se encuentra ubicada la sede de su taller, aportando parte de sus habilidades, conocimientos, incluso resultados económicos a los niños sin amparo filial, así como a la colectividad de personas que residen en los alrededores del lugar.