Yander Zamora: Cuba es muy fotogénica si sabes dónde mirar
Encontró lo bello de un instante en medio del desastre y lo exaltó a través de una imagen; como cuando la mirada y la sensibilidad se entrejuntan para inmortalizar un fragmento de realidad. Así lo hizo Yander Zamora, autor de la fotografía donde un niño salva un busto de José Martí del destrozo de Irma, después de su paso por un pueblo de pescadores en la costa norte de Ciego de Ávila.
Sucedió en Punta Alegre. Hasta allí viajó el joven, cámara en mano, para dar cobertura al huracán para el periódico Granma. Antes abrió un mapa y analizó “los pronósticos por donde pasaría el ojo”.
Llegó días antes junto al periodista Jank Curbelo y pudo apreciar el desamparo de unos tres mil habitantes, cuyo único resguardo en un centro de evacuación era la solidaridad entre ellos mismos, según cuenta. Fue una experiencia casi comparable a la del huracán Matthew en Baracoa, a donde también fuimos los dos”, confiesa.
Cuando el fenómeno meteorológico se alejó dejando en pie solo las zapatas de las casas, ambos salieron a lo suyo.
“Mientras Jank hacía entrevistas, yo cambié el lente por el teleobjetivo y observé al niño a unos 80 metros con el busto de Martí.
“Tomé esa imagen en un instante durante el cual me miró. Al segundo día encontré al mismo niño con el mismo busto para arriba y para abajo. Entonces pensé que tenía algo especial, pero todo quedó ahí. Me faltó el instinto para caerle atrás”, explica Yander mientras detalla su vivencia.
“Nos quedamos incomunicados por dos días y cuando abrieron el paso a la ciudad, la prensa local entró en un carro y les pedí me llevaran a Ciego de Ávila. La foto no la envié al Granma, pues nunca las envío todas. Poco después la subí a Facebook a través de una línea extranjera que tenía en el teléfono y comenzó su historia. Leer Más