Fallece el actor cubano Enrique Molina a causa de la covid
«Acaba de fallecer mi padre. Gracias a todos por tanto amor. Si algún día quieren estar cerca de Enrique Molina, vengan a donde estoy yo, porque vive dentro de mí», así publicaba Pavel Molina Ruiz, en su perfil de Facebook, el deceso de uno de los actores cubanos más queridos. “Me cogió esta mierda caballero” en su propia voz, Enrique Molina notificaba su contagio, mediante un audio publicado por su hijo Pavel en sus redes sociales.
Seguidamente, las muestras de cariño y los deseos de mejora no se hicieron esperar, por parte de compañeros, amigos, reconocidas figuras de la cultura a nivel internacional y del público cubano en general.
Tras permanecer ingresado bajo el cuidado de un equipo de personal médico multidisciplinario, que luchó por salvar su vida hasta las últimas horas, murió a causa de complicaciones derivadas de la Covid-19.
Enrique Molina a través de sus personajes
Recordado por su interpretación de Silvestre Cañiso, en la reconocida novela Tierra Brava, al momento de su deceso, con 78 años de edad, el galardonado actor y Artista de Mérito del entonces Instituto Cubano de Radio y Televisión (ICRT) se encontraba inmerso en la grabación de una nueva novela.
Con una larga y consolidada carrera artística y profesional y una preparación autodidacta, es amado por sus disímiles personajes en novelas como Bajo el Mismo Sol y La Otra Esquina, entre otras producciones.
En la serie En silencio ha tenido que ser, demostraba su magistral compromiso con la actuación, para posteriormente, recalcarlo con su interpretación de Vladimir Ilich Lenin en El Carrillón del Kremlin y posteriormente en la miniserie Relatos sobre Lenin, donde se sometió a cirugías para cambiar su físico y lograr con creces introducirse en la piel del personaje.
Con una amplia filmografía, Enrique Molina participó en obras como Caravana Polvo Rojo, Jíbaro, Una novia para David, Hello Hemingway, Derecho de Asilo, Un paraíso bajo las Estrellas, Páginas del diario de Mauricio , El cuerno de la abundancia, El Benny, Mañana, entre otras.
Sin dudas su muerte ha provocado un vacío profundo en la cultura cubana y en los medios habituales, donde su presencia era un puntal de la actuación.
Esta pérdida ha sido un fuerte impacto en nuestro panorama cultural de la nación, donde a solo tres días del mes de septiembre ya ha perdido a dos de sus grandes: Adalberto Álvarez y Enrique Molina.
Lleguen desde VISTAR nuestras más sentidas condolencias a familiares y amigos.