Rolando Cabrera con cámara en mano (+Entrevista)
Hace aproximadamente un año y medio que Rolando Cabrera, con 20 años de edad, emprendió su aventura detrás del lente y ahora le cuenta a VISTAR en entrevista sobre el breve, pero intenso camino que ha recorrido. Comenta que surgió de manera despreocupada, entre amigos, con el objetivo de mejorar su imagen en las redes sociales. “Poca cosa”, nos dice.
De tomar imágenes con su móvil, un LG G4, decidió comenzar cursos de fotografía impartidos en la academia Cabrales del Valle, en la Escuela de Fotografía Creativa de La Habana, o con el profesor Yuri Obregón en la librería Alma Mater. Durante este tiempo consigue su joya, una Canon 1100D (la compró en una increíble ganga, que muchos no le creen).
“De manera profesional, mis primeras tomas fueron durante la cobertura de los conciertos de Havana World Music 2018”, nos cuenta y agrega que encontró en las redes sociales la vía perfecta para mostrar su trabajo a los demás y darse a conocer. “Instagram se ha convertido en un medio para propagar tu trabajo de manera más amplia y que llegue a un gran público en mucho menor tiempo. En lo personal, sacrifiqué mi cuenta para dedicarla solo a mostrar mi trabajo”, afirma.
Se confiesa un apasionado de la fotografía de publicidad y moda. “Comencé por la fotografía de campaña para HWM, con capturas de Haydeé Milanés, Cimafunk, Lolo Lovina, Orishas. Pero la moda me ha apasionado. Trabajo principalmente con mujeres jóvenes, me gusta la sensualidad, el esplendor que pueden mostrar, y lo que puedo lograr con las modelos en distintas situaciones y lugares. Se trata de explotar la imagen con quienes trabajo”.
Hasta la fecha, este artista que, para otra sorpresa, estudia sociología en la Universidad de La Habana, ha trabajado con marcas cubanas como Kronos Art Group y Clandestina, en sesiones especiales para sus colecciones. Nos comenta que “nunca antes me imaginé dedicarme de manera profesional a la fotografía. Aunque yo comencé en el arte de pequeño estudiando artes plásticas. Y ese salto, ese reencuentro, ha sido como volver a ese inicio”.
Ante la pregunta sobre una posible relación entre su carrera académica y la de fotógrafo, Rolando Cabrera responde: “Creo que sí, creo que incluso puede hacerme variar mi trabajo a medida que vaya avanzando en la carrera. Hoy, creo que solamente hay algunos lazos muy pequeños entre ambas”.
Rolando asegura, que su edad no ha sido un impedimento para desarrollarse, sino todo lo contrario. “Creo que me ha abierto puertas porque mucha gente se sorprende cuando me ven. Mi edad no es importante. Siempre sigo un consejo que me dieron hace un tiempo: para ser profesional, debes proyectarte como tal. Y eso siempre lo llevo en mi mente”.
Ahora prepara, con calma, su primera exposición con instantáneas de su serie No me mires así, en colaboración con la fotógrafa Cecilia Mariño, además de tener bien guardadas otras series inéditas que, ojalá, pueda mostrarnos un día en lo que promete ser una larga carrera y camino por delante para este joven socio-fotógrafo.