El último concierto del Festival Jazz Plaza 2018
Cuando el público aun buscaba su asiento, desordenado, comenzó el último espectáculo del Festival Jazz Plaza 2018. César López y Habana Ensemble abrieron, con energía, la primera parte del concierto de clausura de esta edición.
Durante su presentación de más de una hora, el exintegrante de Irakere, extendió el aplauso al arte joven cubano. Fluyendo junto a las luces, el músico tocó temas donde el saxofón gritó su talento por toda la sala, y se robó las pasiones del público.
Con el tema “Parker ‘s Soul” versionó el jazz clásico con elementos de la música tradicional cubana. Y el saxo se lanzó contra el silencio de la gente expectante, ansiosa por soltar sus aplausos de un momento a otro.
César López no pudo contenerse de bailar mientras homenajeaba al danzón, al que denominó como “una de las grandes fortunas de la música cubana”. Su presentación fue un recorrido por las diferentes sonoridades del jazz; oír su instrumento fue como sentirse enamorado.
En la segunda parte, quizá las más esperada, llegó Roberto Fonseca. Sin terminar de arreglar su silla se lanzó sobre el teclado. El público aplaudió excitado este jazz moderno, que también tuvo la fuerza de Ruly Herrera en la batería.
El carisma de Roberto Fonseca hizo que la noche fluyera de un tema a otro con total naturalidad. Después del opening, llegó “La llamada de un amigo”, un tema más melancólico, lleno de sonidos futuristas que combinaban el piano clásico con los sonidos electrónicos.
La complicidad entre los músicos, que disfrutaban tanto escuchar como tocar, fue evidente. El público cantó junto a Fonseca vocalizaciones que sonaban a sonidos ancestrales, para luego romper en un tema más movido.
Al escenario se llegó Orlando Valle Maraca para tocar un jazz lleno de rumba. Eliades Ochoa, al que Fonseca llamó “uno de los instrumentistas más bellos que tiene Cuba, superoriginal y superauténtico”, vino a recordarnos nuestras raíces. Carlos Millares puso al público de pie para bailar. Los cantos africanos de Eme Alfonso conectaron con el universo.
Casi al final llegó X Alfonso para cantar algunos de sus temas más conocidos a tiempo de jazz. “Santa”, “Dominó”, “Habana 8 p.m.” y “Habana Blues” se llevaron los aplausos del público que extrañaba verlo en los escenarios.
Luego de tres horas de música, finalizó el último concierto de esta edición del Jazz Plaza 2018 que desde ya viene dejándole el listón bien alto al Festival 34.