Cuba llora la muerte de Marcos Mundstock
Hasta ayer los videos de Les Luthiers se seguían viendo en Cuba. Pasados en memorias flash, proyectados en las noches del Proyecto Delta o a través de la plataforma YouTube. Pese a iniciar su trayectoria en los años sesenta y setenta del siglo pasado, el grupo humorístico argentino es admirado con fervor entre los cubanos más jóvenes. Quedaban vivos solo tres de sus miembros fundadores: Carlos López Puccio, Jorge Maronna y Marcos Mundstock. El tercero acaba de fallecer este miércoles en Buenos Aires, a la edad de 77 años.
«Después de más de un año de lidiar con un problema de salud que se tornó irreversible, Marcos, nuestro compañero y amigo, finalmente partió. De ahora en más, cada uno de nosotros deberá empezar a transitar el doloroso camino de aprender a convivir con su ausencia», expresó un comunicado a nombre de Les Luthiers.
El grupo combina el talento y la experimentación musical con un humor inteligente, basado en el absurdo. En ciertos círculos, muchos de sus juegos de palabras se recuerdan en Cuba casi con la misma facilidad que los diálogos de Elpidio Valdés. Casualmente se nos acababa de ir Juan Padrón hace poco, el mismo día que Albert Uderzo, el humorista creador creador de Astérix. Dato curioso: uno de los antiguos integrantes de Les Luthiers, Ernesto Acher, vino a Cuba en 2014. E incluso hizo una actuación con Virulo en el Karl Marx para el público cubano.
Mundstock se recuerda por su voz grave, con la que presentaba los divertidos relatos de Les Luthier. «Nos quedará el recuerdo de su voz, única e inconfundible. Y de su presencia sobre el escenario, con su carpeta roja y frente al micrófono, que cautivaba al público antes de decir una sola palabra», evocó el comunicado.