Nuevo proyecto de Fabrica de Arte Cubano para el NFT en Cuba
La Fábrica de Arte Cubano (FAC) se ha lanzado a un nuevo proyecto, relacionado con la creciente ola de NFTs en Cuba.
La Fábrica de Arte Cubano (FAC) se ha lanzado a un nuevo proyecto, relacionado con la creciente ola de NFTs en Cuba. En lo sucesivo, escucharemos hablar sobre nft.FAC, “una iniciativa que surge con el objetivo de apoyar y difundir la cultura del NFT entre los artistas locales y viabilizar su acceso a la nueva economía creativa del arte digital”, según la convocatoria extendida por dicho espacio en las redes.
El grupo de curadores y especialistas de FAC, atendiendo a la nueva circunstancia que vive el arte dentro del universo digital, pretende “guiar y facilitar a los artistas de nuestro patio el uso de esta revolucionaria vía en desarrollo”. Además, “aspira a la creación de una galería virtual con exposiciones transitorias, que exhibirá archivos previamente hospedados y luego generados en NFT.”
Desde su aparición en 2014, la Fábrica de Arte Cubano se ha definido como un espacio cultural de diálogo vanguardista. En ese sentido, dicho proyecto ha acogido y potenciado toda clase de expresiones socioculturales, apoyando así el movimiento artístico emergente dentro de la Isla. Esta vez, el grupo creativo de FAC se inclina por una alternativa creativa ya imposible de ignorar, dada la progresiva incursión de varios artistas cubanos en la creación y comercialización de NFTs.
Una reflexión que no está de más…
En la convocatoria se precisan ciertas bases a tener en cuenta para aplicar a nft.FAC. Una de ellas, en particular, precisa la exclusividad de trabajo con dicho proyecto. Algo que, si se quiere, podría convertirse en una limitación para la libre movilidad y el alcance de los artistas cubanos ya relacionados con las plataformas de NFTs. Hagamos un alto para pensar en esto.
Precisamente, desde la aurora del mercado de arte digital como NFT, se ha hecho énfasis en las marcadas diferencias que este guarda respecto al mercado de arte tradicional. Uno de los estandartes que más se resalta es la definitiva “autonomía” que conquistan los creadores respecto a las galerías, los dealers y el sistema-arte de manera general.
Sin embargo, parece obvio que la práctica supera aquí a la teoría, pues en más de un caso se replica el modus operandi legitimado dentro del histórico circuito del arte, esto es: las galerías virtuales definen nóminas, los artistas quedan atrapados por la exclusividad de un contrato, la compra-venta viene mediada por terceras personas.
Pienso que no está mal que así sea, siempre que todo funcione adecuadamente y en beneficio de nuevas vías de promoción para los artistas cubanos. Sin embargo, la idea de “exclusividad” se antoja algo conservadora en un nuevo contexto donde se apunta, precisamente, a la apertura y la movilidad en el trabajo artístico.
Tengamos en cuenta que la aparición de los NFTs está relacionada a un ámbito creativo desde siempre subestimado por el arte tradicional. El NFT ha sido el método por el cual varios artistas digitales, sin vínculo alguno con las Instituciones del arte, han legitimado su trabajo por lo que es, sin apoyarse en los soportes convencionales. En cambio, la progresiva entrada del arte en este nuevo horizonte ha venido a modificar las reglas, al asimilar el fenómeno de los NFTs a cierta dinámica que le es ajena y de la cual escapa por su esencia.
nft.FAC como un nuevo horizonte
Volviendo al proyecto que ahora impulsa FAC, me parece de una gran pertinencia para los tiempos que corren. De hecho, si algún espacio puede tomar cartas en el asunto y hacerlo con un criterio suficiente, ese es el buque representado por el artista X Alfonso.
La aparición del proyecto nft.FAC amplia ahora el horizonte de expectativas que tenemos en Cuba en torno a este fenómeno de moda. Los artistas cubanos ya pueden contar con esta alternativa que, estoy seguro, garantizará su empuje dentro del mercado global de NFTs.
Para consultar el documento original puedes entrar desde aquí.