¿Cómo ser influencer en Cuba y no morir en el intento?
Si uno realiza la acción googlear la palabra influencer, probablemente se topará con la cereza del pastel, la clave del éxito en dicha empresa: mantener una presencia online estable. Pero, ¿qué sucede cuando tu acceso a internet es tan intermitente como las luces de un semáforo? ¿Qué dificultades implica mantener la visibilidad en un país donde la desconectividad genera un desafío que reclama todo tu empeño y le abre un hoyo al bolsillo?
El manual criollizado para influencers es un título todavía pendiente, quizá para ser escrito por la generación Z. Dicho esto, tener una presencia significativa en las redes sociales implica en Cuba reinventar recetas manidas, construir tu propia clave, improvisar el día a día. En materia de tecnología cuando nosotros íbamos por la harina, el mundo ya venía con el pan. Pero, como es mejor tarde que nunca, la informatización de la sociedad cubana, aunque con digestión lenta, parece ahora no dar vuelta atrás.
La posibilidad de solicitar el servicio de internet 3G en los móviles y los más de 500 puntos wifi que existen hoy en la Isla, han impulsado a los millenials cubanos a expresarse a través de las redes y a conectar con la audiencia que los siguen.
La presencia de los jóvenes cubanos en Internet es cada vez más fuerte y, aunque la mayoría no cuenta con una gran camada de seguidores en el sentido más potente de la palabra influencer, sus contenidos online son bien frescos, creativos y originales; al tiempo que sortean todo tipo de obstáculos técnicos y económicos.
Es imposible no notarlos bajo sol o sereno subiendo fotos y publicando comentarios en las redes. Comprando tarjetas de Internet y cuidando de que no tengan más rayas que un tigre. Luchando con la Wifi Etecsa e ilusionándose con las pruebas gratis. Puedes pararte en una esquina de un parque y comprobarlo por ti mismo.
Precisamente, eso significa ser influencer en Cuba, luchar con una empresa que a la larga tiene más bajones que éxitos. Mi consejo: sé genuino y se interesarán por ti. Encájate de cabeza en el modelo actual de tu realidad y haz de la calle cubana tu inspiración.
