Pánfilo alcanza el millón de seguidores en Facebook
El popular actor y humorista cubano Luis Silva alcanzó el millón de seguidores en Facebook. Quien interpreta al personaje Pánfilo en el programa Vivir del Cuento ya hace rato tiene la preferencia de incontables cubanos que esperan sus ocurrencias cada semana, y ahora le demuestran su fidelidad también desde las redes sociales.
«Hoy amanezco con esta cifra de seguidores en mi Facebook. Un millón de gracias. Gracias a ustedes que dedican unos minutos a comentar, a compartir y a dejar su huella en el trabajo que hacemos. El viejito Pánfilo, a quien creé estudiando en la Universidad en el 2001, nunca pensó contar con ese gran público. Saludos para ti», publicó Silva en sus redes sociales.
Solamente este post en pocas horas alcanzó más 34 mil likes, 4400 comentarios y fue compartido más de 500 veces. Los usuarios colmaron la publicación de comentarios de felicitaciones y apoyo al artista.
Luis Silva estudió Ciencias de la Computación (Cibernética) en la Universidad de La Habana; por aquellos años de estudiante creó a Pánfilo:
“Yo sentía que no tenía imagen de humorista, que no tenía cara de cómico. Sentía que mi cara, mi aspecto físico era el de un estudiante común y corriente, y no servía para dar gracia. Por eso quise inventar un personaje muy lejos de mí. Con mucha más edad, con un estilo propio al caminar, lleno de jorobas, canoso, con pelos en la cara, tenis rotos, pantalones encaramados hasta el ombligo”, recuerda el humorista.
Luego de trabajar haciendo guiones para la radio, participar en disímiles programas de televisión y espectáculos humorísticos, Luis Silva logró consolidar a su Pánfilo en Vivir del Cuento. Este programa se ha convertido en uno de los más seguidos por los cubanos, dentro y fuera de la Isla.
«Lo reconozco, soy mucho más simpático y ocurrente cuando estoy encarnando a Pánfilo que como Luis Silva. Creo que la diferencia es abismal. Por supuesto, a partir de entonces el personaje comenzó a crecer, a adquirir cada vez más características de los ancianos. Me dediqué más a estudiarlos en las calles, en los estanquillos de periódicos, los bancos, la bodega, etc. La hoja de vida de Pánfilo no es la misma hoy que hace diez años. Su historia también ha crecido».