Con 92 años Esther Bejarano canta y rapea
Todos los días, durante largo tiempo, Esther Bejarano miraba de frente a la muerte. Se despertaba con la certeza de que cada hora podía ser la última. Hasta el momento en que encontró en la música una puerta para escapar del horror del campo de concentración de Auschwitz.
Esther era una pianista judía y fue llamada a integrar la Orquesta de Chicas del campamento de exterminio. En ese momento no existía un piano y tuvo que aprender rápidamente a tocar el acordeón. Así fue como logró salir con vida, mientras veía como sus compañeros caían uno por uno asesinados por el nazismo.
Esther Bejarano ya tiene 92 años. Contra todos los pronósticos se mantiene en pie sobre los escenarios. Da giras por medio mundo, mantiene colaboraciones con artistas jóvenes de diversos géneros, especialmente el rap. De ahí que muchos la consideren la rapera más veterana del mundo.
Pero ella se desmarca un momento de ese título. “No soy rapera, pero creo que el rap es un género excelente para llevar el mensaje antifascista a todas las personas y a los jóvenes. Por eso me interesa mucho colaborar con artistas de ese estilo”, dijo a VISTAR.
La artista francoalemana llegó a Cuba junto al grupo alemán de rap Micro-phone Mafia y su hijo Joram.
“Todos los miembros del grupo son como mis nietos, juntos perseguimos un mismo objetivo a través de la música: llamar la atención sobre el nazismo para que nada de eso vuelva a ocurrir”.
Casi nadie podía creer que a sus 92 años Esther Bejarano tuviera fuerzas suficientes para subirse a un escenario y cantar junto a una banda de rap.
“Este proyecto me encanta y me da energía para seguir cantando y llevando mi mensaje. Ahí radica que todavía cante y visite muchas partes del mundo”, explica.
La activista y cantante revela que desde hace años tenía pensado viajar a Cuba. “Estoy muy contenta de poder actuar en Cuba y visitar y conocer esta nación”.